Las charlas del Ciclo de Platón, que abordan discusiones y presentaciones sobre todos los Diálogos, dentro del “Seminario de los Jueves” dirigido por Tomás Abraham desde 1984, fueron sistematizadas por el coordinador para este libro. El nombre deviene del Teatro del Callejón, donde el Seminario –cuarenta personas reunidas leyendo y conversando en un escenario– ha comenzado a sesionar poco antes de la publicación de la obra. “Es muy fácil ser un aficionado a la filosofía, un aprendiz del oficio de filosofar. Basta con dedicarse a ello. Constancia, amor a la lectura, paciencia, compromiso, libertad de pensar y discutir, y humildad” define Tomás Abraham.
El padre de María, coronel del Ejército del Aire, es asesinado en un complot y su familia recibe la noticia de que se ha suicidado. María, de dieciocho años, se siente en parte responsable de la muerte de su padre y busca en la vida situaciones y personas que la castiguen. Se enamora de un apuesto joven holandés durante unas vacaciones de verano y todo hace pensar que se trata del hombre ideal, sin embargo, nada está más lejos de la realidad...
Ya había pasado un largo rato, cuando vislumbraron una luz al final del túnel, conforme avanzaron se dieron cuenta de que no era una, sino varias luces. Era una hilera de antorchas que iluminaban un enorme letrero que decía: BIENVENIDOS AL MICTLAN –¡Al Mictlán! –dijo Lolita sorprendida– ¡No puede ser!, ¡esto debe ser un error!, ¡nosotros no podemos estar aquí! –¿Por qué dices eso?, ¡díme Lolita!, ¿qué es el Mictlán? –preguntó Cristi preocupada. –Es... El Reino de los Muertos ––contestó con voz quebradiza. –¿Cómo dices?, pero eso no existe. –Es la verdad, aunque no puede ser cierto, porque eso significa que estamos muertas, ¿o no? Se miraron, de arriba abajo como tratando de notar alguna diferencia en sus cuerpos o en sus caras, algo que les indicara si estaban vivas o muertas.
La muerte de un popular artista obligará al matrimonio Pitt a adentrarse en el sórdido inframundo londinense. La cuarta novela de la serie del inspector Pitt Un hecho insólito sacude las calles de Londres: varios cadáveres exhumados aparecen en distintos puntos de la ciudad. El inspector Pitt sospecha que esta macabra profanación de tumbas no es obra de un simple psicópata, sino una cortina de humo para desviar la atención de la policía. El cadáver de un tal Godolphin, pintor de cierta fama, despierta de manera especial su interés; por lo visto, es el único que no murió por causas naturales.
Un callejón es una calle corta, estrecha, en numerosas ocasiones sin salida, lo que llamamos un «cul de sac» y pobremente iluminada. Un lugar de paso que comunica, por lo general, dos calles mayores, con mayor tránsito humano y de vehículos, y con mejor iluminación.De día es oscuro y solitario, con esa tristeza que sólo adquieren los jardines privados y escondidos, con sus caminos cubiertos de hojas secas y quebradizas a finales del otoño. Pero la oscuridad nocturna eleva un grado esa sensación de pérdida y abandono, su aspecto adquiere tonalidades de innombrables pesadillas y los niños, intrépidos y aventureros, juegan a cruzarlo a la carrera, perseguidos por terrores atávicos e incomprensibles a la espera de ser sorprendidos, a mitad de su cabalgada a lomos de caballos tan poderosos como invisibles, por espantosas brujas esperpènticas y horrorosas, o por algún tenebroso trasgo o demonio, que adquiera forma física en alguno de sus recovecos y rincones más oscuros. Cuando acaban de cruzarlo resoplan, temblorosos y satisfechos, orgullosos de haber vencido al miedo y sonrientes por finalizar con bien la prueba. Una prueba que, con toda seguridad, repetirán la...
"En un lugar de la Mancha de cuyo nombre (...)", ahora mismo no recuerdo, llega a mí este libro de crónicas y ensayos. Reto impuesto que escribiese para él, este sencillo prólogo y mientras las palabras se van apoderando de esta hoja y queda plasmada en ella el contenido de esta síntesis, que tiene como motivo invitarlo a usted, querido lector, a continuar como yo en la lectura de esta obra, que no solo lo sorprenderá por esa gracia que tiene el autor a la hora de narrar sus vivencias, a veces con el jocoso carisma que lo caracteriza, otras con la seriedad y el respeto que lo conlleva, pero también con la benévola ironía con que maneja algunos de sus empirismos. Para un auténtico y nativo bautense que carga con tantas vivencias, recuerdos y que lleva arraigada la cultura porque la trae consigo; vive por ella y hasta ha de morir varias veces en el difícil andar de los artistas, ha traído a estas páginas a creadores de la región, que han contribuido al crecimiento artístico del lugar, porque Bauta no solo es un municipio más, situado dentro del territorio artemiseño, este pueblo sorprende con su historia, brinda y aporta no solo a la cultura de la región, sino a la ...
"En un lugar de la Mancha de cuyo nombre (...)", ahora mismo no recuerdo, llega a mí este libro de crónicas y ensayos. Reto impuesto que escribiese para él, este sencillo prólogo y mientras las palabras se van apoderando de esta hoja y queda plasmada en ella el contenido de esta síntesis, que tiene como motivo invitarlo a usted, querido lector, a continuar como yo en la lectura de esta obra, que no solo lo sorprenderá por esa gracia que tiene el autor a la hora de narrar sus vivencias, a veces con el jocoso carisma que lo caracteriza, otras con la seriedad y el respeto que lo conlleva, pero también con la benévola ironía con que maneja algunos de sus empirismos. Para un auténtico y nativo bautense que carga con tantas vivencias, recuerdos y que lleva arraigada la cultura porque la trae consigo; vive por ella y hasta ha de morir varias veces en el difícil andar de los artistas, ha traído a estas páginas a creadores de la región, que han contribuido al crecimiento artístico del lugar, porque Bauta no solo es un municipio más, situado dentro del territorio artemiseño, este pueblo sorprende con su historia, brinda y aporta no solo a la cultura de la región, sino a la ...
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